ALCAUDETE DE LA JARA
Fuente informativa: La Villa de Alcaudete de La Jara de D. Fernando Jiménez de Gregorio.
La jurisdicción municipal de Alcaudete
ofrece un perfil semejante a América del Sur. La zona serrana ocupa la parte
meridional y angosta, adquiere mayor desarrollo en el centro y norte, cubierto
de llanuras alomadas y vegas.
La cuenca del Jébalo medio ocupa el
territorio, dando lugar a un valle profundo, tajado en las duras pizarras,
después se abre a fertilísimas vegas en donde proliferan las famosas huertas alcaudetanas
y las alamedas en donde crecen los fresnos y los yerbazales de sus prados.
Es en buena parte, próvida tierra
cereal, al que siguen en importancia, sus hortalizas, el olivar y el ganado.
Tierra esta donde dejó huella la cultura
neolítica como atestiguan los gravados y pinturas del Martinete. Posteriormente
conocida por los iberos como testimonian las necrópolis de los Villarejos y por
los pastores celtas como evidencia el verraco de El Cortijo. Dejan huella de su
presencia también, romanos, visigodos y árabes. Sirvan como testimonio de la presencia
islámica, Rozas Viejas y las torres del Cura y de la Casa de la Torre. Es precisamente
de este periodo de dominación islámica de la que conservamos el topónimo
Alcaudete.
Tras los árabes llegan las órdenes
militares de Calatrava y San Juan.
A comienzos del siglo XV se documenta la
iglesia, aunque sin duda es más antigua. Al primitivo templo, del que tenemos
escasas noticias le sucederá el mandado construir por Dr. Juan de Algarra en
los inicios del siglo XVI en estilo gótico, con algunos detalles renacentistas.
La iglesia resulta una construcción
solemne y grandiosa, sin duda la mejor y más importante de la comarca de La Jara.
En el siglo XVIII Alcaudete es ya un
núcleo de población consolidado, que camina siguiendo la orientación de los
arzobispos toledanos y la línea administrativa de Talavera, a cuya jurisdicción
pertenece.
En 1911 cambia su estatuto de lugar por
el de villa, prosigue su andadura en el medio rural, viviendo de los frutos de
la tierra y de los rebaños.
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