miércoles, 30 de septiembre de 2015

Gargantilla de La Jara II - Arquitectura Popular

Vista de Gargantilla

En Gargantilla- Alfonso Yuncar.

Con frecuencia, al visitar alguno de nuestros pueblos de La Jara, los vecinos se extrañan de nuestro interés en fotografiar viejas casas, viejos  oficios o artesanías a punto de desaparecer.  Cuando explicamos  que para saber quienes somos, antes debemos conocer de donde venimos, lo entienden perfectamente.

Al llegar a Gargantilla la desconfianza de nuestro amigo Julian, que da de beber a su mula en el viejo pilón, desaparece con esa escueta respuesta, y ya hilamos la conversación sobre cómo se presentan  este año las cosechas de almendras o aceitunas, o si conocemos a tal o cual vecino de nuestro pueblo.

Hay pueblos como esta Gargantilla que se acurruca en  la falda de la Sierra, que al recorrer sus viejas callejas y observar a sus vecinos saliendo de la misa dominical, cultivando sus huertos u otros cotidianos trajines,  nos hacen sentir  en propia casa. Más aún, la nostalgia nos saluda desde cualquier rincón o nos llama desde  algún viejo ventanuco, nos  hace un guiño cómplice y nos  devuelve la merienda del pan con higos, el goteo de las canales, los lejanos días de escuela, de parvas y pastoreos,  los juegos bajo las estrellas,  los inviernos a la lumbre…En fin, tiempos idos, y ya pura arqueología para quienes nos van a suceder.

Cada vez que escribo sobre esta humilde y hermosa tierra, me resulta imposible sacudirme esa nostalgia, que con terquedad perruna suele aferrarse a quienes nacimos y emigramos a otros lugares.

El poemilla que sigue se lo dedicamos al pueblo de Gargantilla y por extensión a tantos de nuestros paisanos que un día se vieron forzados a emigrar:

La PartidaAlfonso Yuncar.

Duerme en sosiego la aldea
Vaga entre nubes la luna
Puede que llueva mañana
Rebuzna un burro su pena
Gime el autillo en la rama
El aire se despereza
Se ilumina una ventana
Mi corazón se recela
Adioses de madrugada. 
        
        
 La vieja muela

Viejas ventanas:






























Aventaderos:





Cerrojos:





Zahurdas:

















Tinada

Las Eras

Detalles varios:








Vista con olivar

lunes, 21 de septiembre de 2015

Gargantilla de La Jara



Gargantilla de La Jara- Fernando Jiménez de Gregorio

Mozárabes cordobeses huidos como los de Sevilla, buscan refugio en La Jara administrada, por Talavera, que les da licencia para que colonicen o funden pueblos en este territorio, no lejano de la reciente Sevilleja. Conocemos menos detalles de estas fundaciones, pero la toponimia viene en nuestra ayuda, puesto que se conservan en el territorio dos alusiones a Cordobilla y una a Cordobesa, veamos:

A kilómetro y medio de Sevilleja, baja de la Cumbre Alta una llamada garganta Cordobilla, que disfruta de la misma ventajosa situación de Sevilleja, esto es, está protegida de los vientos fríos de Norte por la Sierra, goza de abundante agua proveniente de la mencionada garganta y no está lejos de ese camino entre el monte que iba al Puerto Viejo. Este antiquísimo camino salvaba el Tajo por el ya desaparecido puente de Canturias (Belvís), pasaba por lo que después sería la Nava de Ricomalillo, llegando a la Cordobilla (luego Gargantilla), Sevilleja y el Puerto Viejo. Las humildes chozas se fueron alineando a ambos lados del arroyuelo y así creció La Cordodilla sobre una base económica melera, cazadora y leñadora.

Pasado el tiempo invadido de nuevo el territorio,  ahora por los almohades a mediados del siglo XII, algunas de las poblaciones repobladas se abandonan, aunque fuera momentáneamente, como pudo suceder con La Cordobilla y cuando ya en el siglo XIII, derrotados los almohades en la Batalla de las Navas de Tolosa (año 1212) se libera definitivamente el territorio, se repuebla La Cordobilla, que pierde ese nombre y queda solo el de Gargantilla, que hoy conocemos. Pensamos que el primer nombre pudo ser el de Gargantilla de la Cordobilla, quedando solo el primero. Se llama Gargantilla, con este diminutivo para distinguir esta garganta de la próxima, mas grande, conocida como Garganta de Río Frío. La base económica como ya se vió, fue una muy antigua posada de colmenas.

A mediados del siglo XV se cita ya con el nombre de Gargantilla esta aldea.

El grupo de mozárabes cordobeses debió ser el mas numeroso de los huidos de Al-Andalus mas que el de sevillanos y malagueños, lo decimos porque da lugar a tres fundaciones: La Cordobilla, hoy Gargantilla, otra Cordobilla, hoy la Mina de Santa Quiteria y la Cordobesa, paraje en la actualidad ubicado en la parte Sureste del Campillo de La Jara, no lejos del límite con Sevilleja, frente al Cerro del Cabezo.


La plaza de la Iglesia con a fuente en primer plano.

Salida de misa de domingo

         Interior de la Iglesia

                                                 Retablo del altar mayor                                                    
                                         
             Fuente-abrevadero en la plaza de la Iglesia

Nuestro amigo Julian y su mula



Casa Rural "Miel y Romero"



Madre con su bebé

Arquitectura popular, ésta y siguientes:



























Vista con la torre de la Iglesia

Vista entre almendros y chumberas

La vuelta del huerto

Arquitectura popular





En el huerto







Con la entrada del otoño se da en nuestros montes un espectáculo digno de conocer, la berrea del ciervo. Aquí os dejamos este interesante vídeo de Luis Miguel Domínguez Avatar